Contador de visitas

5 sept 2013

El dolor de cabeza


Hijo mío... ya sé que aun no has nacido y ya te estoy dando lecciones... ¿sabes que comparto con Marcus de la verde Tierra de Immert? Comparto el dolor de cabeza... ese dolor que empieza porque si y no hace más que provocar mal genio hasta que eres consciente del origen del mal humor. Él me enseñó que arando la tierra descarga su ira y relaja su mente. Alguna vez lo puse en práctica, y realmente funciona. Aunque no siempre tengo tierras para arar; entiendo el significado, el concepto.

Mi desafío: luchar contra mí. Pelear contra mis propios impulsos, vencerme a mi mismo. ¿Y si me venzo... estoy ganando o estoy perdiendo? Curiosa contradicción en la que radica mi propia existencia. Ni dioses ni universo: el Rey Guerrero, Julius de Sefar, encontró la solución. Aquella solución que ya tenía yo, pero para él era más evidente: no rendirme, liberar mi rabia, sin hacer daño a nadie.

Veremos si soy lo suficientemente fuerte para vencerme. Pero no será esta la batalla que yo pierda. Parece que esta alma que no es mía, aun me acompañará por los senderos durante algún tiempo. Si tenemos que seguir... que así sea.

Me alimentaré de la energía que me prestan mis seres cercanos, así venceré con total seguridad.

(El legado del Guerrero XLI)



http://sendaguerrero.blogspot.com.es/

No hay comentarios: