Contador de visitas

22 ago 2011

Perder la esperanza



Alguien llora en la tierra más allá del mar. El reino de Silh, un reino humilde. Reza por la pobreza que asola la tierra, reza por la sombría decadencia. Clama por alguien que levante el ánimo de la humanidad. El ruido de unos pasos le hace girarse con violencia y levantarse. La que antes era una simple muchacha, ahora es una fiera defensora. Un hombre joven, camina con la mirada perdida hacia ella, no porque le vea, sino porque camina en línea recta. Tropieza con una simple piedra y cae de bruces al suelo. Se desmaya exhausto.

Despierta al cabo de un día. Se levanta extrañando todo lo que le rodea. Apenas habla, no recuerda su nombre ni cómo llegó allí. No sabe dónde está. Mira todo con la curiosidad de un niño pequeño. Deberá ayudar a vender grano y baratijas en el pueblo para ganar la comida si quiere quedarse.

Apenas es capaz de tomar decisiones. Sigue a Rito, la que clamaba por alguien que no llegó. Caminan hasta el pueblo donde ella agacha la cabeza para pasar desapercibida por guardias que buscan divertirse. Finalmente un empujón al muchacho llega, abusan de la debilidad del joven. Él no pasó desapercibido, no sabía que debía hacerlo. Ella se vuelve para defenderle, les grita. Con un poco de alboroto consigue que les dejen en paz.

"Deberás aprender a defenderte" - le dice Rito, le limpia las heridas - "No durarás mucho por aquí, al menos huye y escóndete" - él no se ha quejado ni ha ha hecho mueca alguna ante esas heridas.

Venden lo que necesitan, compran comida y regresan a casa. Él sigue sin reaccionar. No deja nunca de mirar atrás, como si le persiguieran, como si estuviese muerto de miedo.

(Primer cuento del renacer, la ignorancia de un desconocido)



http://sendaguerrero.blogspot.com/

No hay comentarios: